Información
Ciudad: MOSCÚ
Pais: RUSIA
Fecha: ABRIL 2019
Viajandoentacones en MOSCÚ
Que me voy a Rusiaaaaaaaaa!! Alaaaaaaaaa...que emoción, la verdad que era un país que lo veía tan lejano que nunca había pensado en ir.
Pero un día hablando con Carol donde podíamos ir en un mes de abril, que no hace todavía calor para coger un destino de playa, y tampoco un frío aterrador...buscando opciones, apareció la palabra Moscú. Y oye, que me gustó la idea!!
Así que miramos los vuelos (pensaba que iban a estar intocables los precios) y vimos que eran aceptables, así que sin pensarlo mucho más, los compramos! Un poco a lo loco, sin pensar en todo el papeleo que después tuvimos que hacer. Necesitabámos un visado de turista y lo que ello conlleva (rellenar formularios, etc...y 58 euros...jejejeje). Pero bueno, no quedaba otra que hacerlo sinó no entrábamos a Rusia.
Para tramitar el visado, aquí tenéis la web donde yo me informé.
Una vez todo en regla. Deseando que llegara el día! Unas 4 horas y media de vuelo y entrabámos a una de las potencias mundiales....y el país más grande del mundo...casi ná!!
Llegamos volando de noche y casi sin dormir. Para llegar al centro de la ciudad hay varias formas, en tren, taxi o bien Uber o Yandex (las dos empresas que funcionan). Tener en cuenta que no disponíamos de datos móviles, y que en el aeropuerto sólo coges Wifi si tienes un número de teléfono de Rusia, así que ya de entrada no fue fácil.
Una chica que venía desde Barcelona y era rusa, nos ayudó comparttiendo sus datos móviles para que pudiéramos avisar un Yandex y nos viniera a recoger. Aquí empezaba la odisea en Rusia.
En Yandex nos dirigimos a nuestro primer hotel, hora punta y con un tráfico espantoso en Moscú, tardamos como 1 hora o más...nos costó unos 1500 rublos (22 euros), pero fue cómodo ya que estábamos muy cansadas! Aprovechamos para dormir un poco en el trayecto. Por fin, llegamos a nuestro primer hotel, en el centro sur de Moscú:
Hotel CROSSROADS Moscú
Estábamos deseando movernos por Moscú. Como sabéis Moscú es la capital de Rusia y a partir de ahí yo poco más sabía, una gran desconocida pero con mucho arte, glamour, tecnología y con unos grandes paisajes ricos en cultura y arquitectura. Yo estoy impresionada con Moscú, nunca pensé que me gustaría tanto.
También tengo que deciros que este viaje ha sido todo un reto ya que nos hemos encontrado con situaciones que tampoco esperábamos y que han sido superadas gratamente al final, pero en momentos ha sido complicado. Pero todo ha valido la pena!
Estar en Rusia, sin internet, ni GPS, sin letreros en inglés, tan sólo nombres en el alfabeto ruso, casi nadie sabía ni unas pocas palabras de inglés...hubo momentos críticos, pero por suerte salimos de todo y puedo decir (los primeros días no lo decía...jajajajaja) que volveré a Rusia!
Pues nuestra primera parada era ir hasta el Kremlin y la famosa Plaza Roja de Moscú. Para ello utilizamos por primera vez el metro de Moscú, característico por las obras de arte que hay en algunas paradas, algunos dicen que es el metro más bonito del mundo...y la verdad es que me lo creo!
En sólo dos paradas de metro y unos minutos andando, llegamos al símbolo por excelencia de la ciudad: a nuestro alcance estaba la Plaza Roja. Lleva este nombre, no por el comunismo sinó porque su traducción literal de su nombre en ruso sifnifica "rojo" y esa palabra deriva de la palabra "hermosa", digamos que la traducción literal sería la plaza hermosa. Corroboro que lo es!
Estábamos en el corazón de Moscú. El kremlin que es un conjunto de edificios y que actualmente se denomina el Gobierno de Rusia, es otro punto clave en la historia de esta ciudad. Se puede visitar pero cuidado que no sea jueves ya que es el día que está cerrado para hacer sus reuniones. Casualmente, era jueves! así que tuvimos que volver otro día...
También está el mausoleo de Lenin y la necrópolis donde están enterrados los restos de otros personajes históricos del país, como Stalin o el astronauta Yuri Gagarin.
También se encuentra la famosa catedral de San Basilio, situada en la misma Plaza Roja pero que no forma parte del Kremlin, esta catedral es mundialmente famosa y sin duda es un emblema de Moscú. Aquí nos hicimos mil fotos desde todos los ángulos...jajajajaja.
Y muy cerca otra llamada, la Catedral de Kazán.
Un edificio que capta mucho la atención de la Plaza, es el Museo Estatal de la Historia de Rusia, al lado está el Museo de la Guerra Patria y la Puerta y Capilla Ibérica.
Otra visita obligada es entrar al Centro Comercial GUM, con entradas desde la misma Plaza Roja. Se trata de un centro comercial muy lujoso y turístico con una fachada de 242 metros y donde podrás encontrar a las grandes firmas occidentales.
En una de las calles que sale desde la Plaza Roja en encuentra la bonita "Calle de las Luces", la peatonal calle Nikólskaya, junto a la Plaza Lubianka, que era la sede de los servicios secretos de la KGB. Esta calle llena de luces tanto de día como de noche es un punto clave de Moscú sobretodo desde el mundial del 2018, donde se reunían todos los hinchas de los equipos.
Caminando llegamos a otras catedrales, basílicas y demás edificios característicos de la arquitectura rusa, que tan original nos parecía. A cada paso, había algo que captaba nuestra atención...
Llegamos alrededor del río y paseamos por él. Es el río que cruza la ciudad, el río Moscova. Ese día caminamos cerca de 20 kilómetros y es que Moscú es una ciudad muy grande, con muchas avenidas enormes y las distancias son impensables.
También nos llamó la atención mucho unos edificios altos que los veíamos por todos los lados. Primero pensamos que volvíamos a pasar por el mismo sitio, pero no....es que hay 7. Son los rascacielos de Stalin, también conocidos como las 7 hermanas de Moscú.
Volvimos al hotel en metro ya para descansar algo, arreglarnos e ir a cenar a:
Restaurante CHAIHONA N.1 Moscú
Terminamos cantando en el karaoke del restaurante...que bien lo pasamos!! Había sido un día muy cansado pero bien aprovechado! Tocaba dormir unas horitas para seguir nuestra aventura rusa al día siguiente.
Nos levantabámos temprano ya que teníamos un tour con la empresa Tours Gratis Rusia, a la ciudad de Sergiev Posad, una de las ciudades que forman el famoso Anillo de Oro de Rusia. Pero eso os lo explico en el post de Viajandoentacones en SERGIEV POSAD.
El punto de encuentro y regreso del tour era el Teatro Bolshoi, así que ya de paso lo vimos y desde allí al finalizar el tour volvimos a nuestro hotel y nos trasladamos a nuestro segundo hotel:
Hotel ELISEEFF ARBAT Moscú
Muy cerca de este hotel teníamos la famosa calle Arbat. Una de las calles peatonales más antiguas y conocidas de la ciudad de un kilómetro de largo y un punto donde los turistas pasean en algún momento de su viaje a Moscú. A media tarde fuimos a pasear por ella y a tomar un café en una de sus muchas cafeterías.
De vuelta, ya a prepararnos para poder ir a cenar a nuestro restaurante, pero antes queríamos pasearnos de noche por la Plaza Roja y alrededores para ver la iluminación y su ambiente nocturno. Espectacular!!!
Y de allí caminando fuimos hacia nuestro restaurante preparadas para cenar en:
Restaurante LAVKALAVKA Moscú
Caímos rendidas de nuevo! Este viaje íbamos a contra reloj, debido a lo mucho que queríamos visitar, lo grande que era Moscú (más de lo que imaginaba...) y las distancias y complicaciones que nos ralentizaban...pero bueno, aún nos quedaban varios días por delante para disfrutar!
Queríamos entrar en el Kremlin, ya que el jueves no pudimos hacerlo por estar cerrado, así que después de visitar alguna de las paradas más bonitas del metro de Moscú, llegamos otra vez a la Plaza Roja, a las taquillas para comprar las entradas y hacer la debida cola. Fue rápido y nuestra entrada que era la más general, costó 700 rublos (casi 10 euros). Entramos al Kremlin de Moscú, compuesto por 5 catedrales, palacios y museos, entre otras como el Zar-Cañón y la Zarina-campana (la campana rota). La catedral más importante dentro del Kremlin es la Catedral de la Asunción.
También se puede acceder a la Armería del Kremlin, que es uno de los mejores museos del mundo.
Una vez visitamos el Kremlin, salimos de él y dimos de nuevo con la preciosa catedral de San Basilio, no dudamos en volvernos a hacer algunas fotos con ella de fondo. Me parecía muy auténtica!
Aún nos quedaban muuuuuuchas cosas importantes por ver, así que decidimos salir de la Plaza Roja (que siempre nos atrapaba....) para llegar en metro hasta la Plaza Tverskaya y encontrarnos con el Arco de Triunfo de Moscú.
Desde allí queríamos llegar hasta el distrito financiero de Moscú, llamado también Moscow City. Sabiáis que en Moscú también había rascacielos? Pues ahí estaban, tocando las nubes moscovitas...
Dos de los rascacielos tienen miradores para ver las impresionantes vistas de la capital rusa, aquí os dejo este enlace por si os puede interesar algunas de sus actividades y ofertas en ellos.
Volvimos al hotel en Yandex, que como os explicaba funciona de maravilla y no son nada caros y por la comodidad y por el tiempo que ahorramos preferimos hacer muchos trayectos así. Antes de pasar por el hotel, volvimos a la calle Arbat para hacer algunas compras y ya después ir al hotel para prepararnos para lo que sería una cena y una noche de lujo. Tocaba nuestra cena en un yate situado en el río Moscova, muy cerca de los rascacielos:
Restaurante YACHT CHAIKA Moscú
Fue impresionante!
Y queríamos terminar nuestra cena, con la guinda del pastel. En la planta 54 se encontraba el Lounge Bar de moda de la ciudad: Oblako 54. Con sus impresionantes vistas de noche a Moscú, al río y a los rascacielos colindantes. Un lounge donde además de disfrutar de la música, las vistas, la compañía, también se podía fumar sisha. Por supuesto, lo hicimos. Queríamos estar y sentir la onda moscovita! Toda una experiencia...
Pedimos un Yandex y nos llevó al hotel. En el trayecto disfrutamos de Moscú de noche. Tiene la misma vida o más que de día...tremendamente iluminado: edificios, puentes, barcos y yates en el río, rascacielos, las plazas...No dejaba de sorprenderme mirara donde mirara.
Llegamos bastante tarde...pero habíamos disfrutado del sábado noche en Moscú como nos merecíamos! Dormimos no más de 4 horas y de nuevo en pie. Para iniciar nuestra ruta en metro al famoso y pintoresco mercado, Izmailovsky Market. Abierto de 9 de la mañana hasta las 18 horas. Es un mercado precioso que parece un pueblecito, lugar ideal para encontrar souvenirs más baratos, las clásicas Matrioskas (muñecas rusas), gemas, bisuteria, ropa y demás artículos, eso sí, recordar regatear!! Pero si tu intención no es comprar, igualmente para pasear y verlo también es recomendable ir.
De allí, queríamos ir a visitar alguna cosa que nos quedó pendiente, pero se hizo tarde y no nos daba tiempo. Todo está bastante distanciado y entre que te puedes perder en el metro o cualquier imprevisto, no podíamos arriesgarnos a perder el avión.
Volvimos hasta el hotel, fuimos a comer por la calle Arbat y de allí nos trasladaron al aeropuerto con tiempo, ya que el tráfico de Moscú ya vimos durante nuestra estancia que es algo aterrador. Que sensación más guay el haber superado este viaje, los obstáculos/barrera del idioma que había sido importante....
Conclusión: Moscú, una ciudad desconocida que queda entre las 5 ciudades de Europa más bonitas que he visitado. Una gran ciudad. Una ciudad imponente en todos los sentidos.
Ahora a preparar el siguiente viaje y éste será a otro continente! Que ganassssssssssss de aventura!
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